No volvería a
saborear sus labios y de eso el estaba mas que seguro... intento
dedicar un minuto de silencio pero es que el recuerdo de sus noches y
sus muslos le robaron una sonrisa... mas llena de melancolía que de
placer.
- Como es que haces
imposible para para que tus sueños se trunquen... - se repetía para
si...
Y no le quedo mas
que acorralarse en una banca del parque, encender el ultimo de sus
cigarrillos... ver el humo danzar y por un segundo el juraba que se
había olvidado del pánico... del miedo... de el vértigo y esas
ganas incontrolables de volver el estomago...
- Como es que haces
imposible – grito una gota de lluvia que se estrello en sus
lentes...
Y se apago el fuego
de su mirada... el calor de sus manos... el fuego de su cigarro, y el
imposible tomo camino a casa... tan solo... tan dolido... tan
imposible.